En septiembre del año pasado Electronic Arts anunció la tercera parte de la saga Dragon Age, bajo el nombre Inquisition. Se desveló un poco de todo, lo más importante es el motor bajo el que está siendo desarrollado el juego: Frostbite 2. Según las palabras del desarrollador de BioWare Neil Thompson en una entrevista para la revista OXM, esta entrega se ve mucho más depurada y confiesa que los artistas involucrados en los anteriores juegos (sobre todo en el segundo) quedaron decepcionados por el aspecto que presentaban sus creaciones, para las que se utilizaban tecnología propia de BioWare: el motor Eclipse. Según comentó Thompson, el equipo está trabajando en ofrecer un estilo diferente a la típica "paleta de colores apagada" que se suele ser típica en los juegos de fantasía.
Estas son algunas de sus declaraciones:
"Dragon Age: Origins y Dragon Age 2 fueron creados con el motor Eclipse de BioWare, y empezó a chirriar un poco cuando Dragon Age 2 fue lanzado"
"Inquisition está siendo desarrollado bajo el motor Frostbite 2 y es un motor sorprendentemente potente".
"Hubo un periodo de preproducción donde casi semanalmente me sentaba en el área de análisis y era deslumbrado por lo que iba mostrándose. Luce increíblemente precioso. Por ello pienso que cuando empecemos a lanzar las capturas de pantalla, la gente no quedará decepcionada".
Poco más se sabe del juego además de estas declaraciones. No han sido mostrados más que algunos concept-arts y la fecha de salida tampoco ha sido confirmada: en un principio Bioware confirmó que el juego llegaría en algún momento de otoño de 2013, pero Tao Gu, uno de los desarrolladores de niveles del juego publicó en su perfil de linkedin que el juego saltaría la actual generación y se esperaría a la siguiente, de la cual aún no tenemos tampoco nada confirmado.
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